Hospital de La Seu d’Urgell: bata pública; bata privada


Recepció de l'hospital de La Seu d'Urgell

Siempre hemos argumentado que la tan manida colaboración público-privada no es tal, sino un a vía de escape de los fondos y/o inatalaciones públicas hacia la privada, especialmente en el terreno de la sanidad, la privada actúa como una rémora que vive a expensas de la pública. El caso del hospital de La Seu de Urgell, que recoge hoy El País, lo ejemplifica.
.
La semana pasada también en El País se decía que El Hospital de La Seu opera antes a los pacientes de pago que a los públicos y comentaban el caso de una mujer que se salta siete meses de lista de espera al recurrir a un seguro privado.
.
También es digno de mención otro caso, el del Parc Taulí, que recogía ayer El País bajo el título: Caridad en la sanidad pública. A pesar de la buena voluntad del médico, que es loable y desinteresada, no deja de ser una derivación de la pública a la privada, con el menoscabo de la pública para saltarse las listas de espera. Queremos agradecer y dejar muy claro que gracias a la acción decidida de muchos médicos y personal sanitario, los pacientes no estamos notando tanto las agresiones que suponen los recortes. Pero hay que pararle los pies a la Administración que lo permite y al Govern que lo propicia.
.
Esta noche a las 20:00 en ComRàdio podrás escuchas a Toni Barbarà comentando los recortes en la sanidad privada, que no son unos pequeños recortes, sino un ataque frontal a la pública para demolerla y privatizarla.
.

En el hospital de La Seu d’Urgell se utilizan por la tarde las mismas instalaciones y el personal para atender a los pacientes privados

Ilustración: SOLEDAD CALÉS

Lo habitual es que un número indeterminado de médicos de la sanidad pública redondeen sus sueldos recurriendo al pluriempleo: atienden por la mañana en el centro público y por la tarde, en el privado. El sistema tiene grandes ventajas. La primera, obvia, la de los emolumentos. La segunda, no menos evidente, la de disponer por las mañanas de una importante masa crítica para engrosar su clientela privada. Los recortes públicos, que están dejando a algunos hospitales sin mantas siquiera para arropar a sus pacientes y que están engrosando las listas de espera son una buena ocasión para multiplicar la actividad privada.

Precisamente gracias a los recortes los médicos del hospital de La Seu d’Urgell (Lleida) han dado con el chollo máximo al respecto. Obligado este centro leridano a cerrar quirófanos por las tardes para ahorrar, los facultativos atienden a sus pacientes por las tardes, pero en el mismo lugar, utilizando salas de consultas y quirófanos, donde no hay lista de espera porque hay que pagar.

De este modo, los empleados sanitarios incluso se evitan desplazamientos, que ya se sabe que el día, sobre todo si hay pluriempleo, cunde poco. A ellos les basta con ponerse la bata pública por la mañana y transmutarse en privada por las tardes. Las instalaciones son las mismas. Las salas de consultas y los quirófanos, también. Las batas, ¿para qué cambiarlas?

Esto es posible porque el hospital de La Seu d’Urgell es un centro público de gestión privada, un modelo que defienden el PP y CiU. No obstante, los agravantes de este caso han movido a la Generalitat de Artur Mas a expedientar al centro leridano e investigar los procedimientos allí establecidos.

Porque estos arrojan demasiados interrogantes, como quién paga los gastos de la tarde (auxiliares, teléfono, luz…), por cuánto se alquilan los quirófanos y si no es demasiada tentación para los sanitarios tener las tardes libres, bien equipadas y tan próximas, para desviar a más pacientes.

Que vamos a una sanidad para pobres y ricos parece evidente; sobre todo con sistemas como este que lo ponen en bandeja y tanto ahorran… a la iniciativa privada.

Fuente: El País

Acerca de Dempeus per la salut pública

Col·lectiu de persones en defensa de la salut pública
Esta entrada fue publicada en Privatización, Salud pública, sanidad pública y etiquetada , , , , . Guarda el enlace permanente.

4 respuestas a Hospital de La Seu d’Urgell: bata pública; bata privada

  1. Pingback: Hospital de La Seu d’Urgell: bata pública; bata privada | Boletín Informativo de la Sanidad Pública

  2. pacient dijo:

    Antes no exisitian los seguros privados?hemos de criminalizar a los que disponen de ellos?no és paradójico que sea precisamente un acto solidario el de aprovechar que pagas mensualmente un seguro y la seguridad social,precisamente para agilizar los trámites de cualquier prueba?

    Me parece demagógicas algunas apreciaciones que hace el País sobre el asunto,ya que des de dónde yo sé ésta fórmula ya existía antes de la crisis y el tripartito.No se ha inventado la sopa de ajo precisamente.

  3. dempeus dijo:

    Tienes razón … en parte, Siempre han existido lo seguros privados y quien pueda y quiera está en su derecho de contratarlos y no hay que criminalizarle por ello, ahora de eso a considerarlo un acto solidario va un abismo.
    Lo que se critica es que se recorte la sanidad pública para acrecentar la sanidad privada y para más «inri» se haga utilizando las mismas dependencias, médicos, consultorios, quirófanos, enfermer@s de la sanidad pública por las tardes, los mismos que durante la mañana se utilizan para la pública.
    El que tiene un seguro privado o paga la visita, se salta las listas de espera de la pública y es atendido por las tardes en la privada, casualmente en el mismo hospital y por el mismo médico. ¿Se trata de un acto solidario?
    Y encima nuestros gobernantes que son los que están minando la sanidad pública con sus repetidos recortes, nos recomiendan que contratemos un seguro privado y nos prometen que podremos desgravarlo.

  4. Marc dijo:

    Te voy a explicar el caso de mi madre en dicho hospital para que te pongas al corriente de lo grave de la situación:
    Mi madre fue operada ayer por la mañana (pública). Toda la operación fue bien, no hubo ninguna complicación en el curso de la intervención. En eso que a las cuatro horas de despertarse de la anestesia, van y la echan (literalmente), y la ponen en un semejante de «hospitalización a domicilio». ¡Pero si aún estaba sangrando de la operación!
    Oí perfectamente desde mi habitación los gritos de dolor que hizo cuando intentó acostarse por la noche. Me asegura que ni cuando me tuvo a mí sintió tanto dolor.
    También me dice como a otro paciente, operado de algo muy similar, le reservaron habitación. Cómo no, era de una mútua.

    Siguente:
    A la vez, mi prima tuvo un hijo la semana pasada. Si pasó 35 horas en el hospital, parto incluido, ya fue demasiado.

    En la ciudad, todos sabemos perfectamente como va la cosa: mañana, sanidad pública, tarde, sanidad privada. Primera planta, sanidad pública, segunda planta, sanidad privada. Buen trato, sanidad privada, trato horrible, sanidad pública.

    Ya tenían fama de malos cuando no había crisis, pero ahora creo que hospitales del Congo deben tratarte mejor.

    La sanidad es un derecho, no un negocio.

Deja un comentario